Tal día como hoy, en 1928, dos pésimos equipos de fútbol logran crear una aleación equitativa de hierro con pequeñas cantidades de carbono que adquiere con el temple gran dureza y elasticidad: el empate acero.
Tal día como hoy, en 1928, dos pésimos equipos de fútbol logran crear una aleación equitativa de hierro con pequeñas cantidades de carbono que adquiere con el temple gran dureza y elasticidad: el empate acero.