Algunas tardes,
me acerco a la ventana, pienso
en la lluvia que no viene,
en la ira del vecino, cuando gruñe,
vuelvo a contemplar el mar,
donde no te encuentras,
ni vas a volver,
por mucho que las olas repitan
las aldabas de tu huida.
Tu eres mi soledad
y mi locura incitas.
Nuria Amat: Algunas tardes (Poemas impuros. Bruguera, 2008)
— — — — —